Un día de enero. Niebla en Matadeon de los Oteros, niebla en santas Martas, niebla encima de la pista de Villamarco. No se puede despegar. Hasta ahí, todo normal.
Pues ya tiene narices que en Villanubla estaba radiante (en Valladolid city estaba cerrado de niebla también) y todos los alumnos pilotos al aire. Así es la vida.